Los amortiguadores son un elemento que ayuda a mantener el control del auto mientras manejas.

En nuestra entrada ¿qué función cumple el amortiguador en el auto? te mencionamos que su principal función es absorber las irregularidades de la calle mientras se conduce; es decir, todos aquellos golpes e impactos que pueden dañar al coche.

Saber cuándo se deben cambiar los amortiguadores del auto puede volverse una tarea complicada cuando no se reconocen las señales que indican un cambio urgente.

Los amortiguadores del auto son uno de los elementos que más suelen desgastarse por la función que desempeñan y deben cambiarse cada determinado tiempo para tener una conducción adecuada.

La manera más fácil de detectar si debes cambiar los amortiguadores de tu auto es empujando el cofre hacia abajo, si rebota rápidamente se encuentran en buen estado, pero si tarda en moverse los amortiguadores ya llegaron al límite útil de vida y deben cambiarse cuanto antes.

4 señales de que tu coche necesita nuevos amortiguadores

• Movimiento excesivo.

El sistema de suspensión se encarga de tener un movimiento regular mientras manejes, pero en caso de que exista una falla se puede detectar un comportamiento fuera de lo normal. Inclusive al momento de frenar el auto puede recargarse más hacia el frente, en lugar de ser acción lenta.

• Ruidos molestos.

Cuando los amortiguadores se encuentran en mal estado provocan ruidos parecidos a un chirrido. Los ruidos que se escuchan se deben a que existe un choque entre roturas, monturas u otras partes. Un chirrido también puede deberse por los resortes de la suspensión, pero para revisarlos también se deben cambiar los amortiguadores.

• Vibración en el volante.

Sentir una vibración lenta o intensa en el volante es fácil de detectarse, esto sucede porque las llantas rebotan más de lo debido. Desde el momento en que se sienta una vibración al manejar se debe revisar el sistema de suspensión y cambiar los amortiguadores.

• Llantas desgastadas.

El desgaste de las llantas suele tener un desgaste parejo, pero cuando los amortiguadores se dañan provocan un desgaste disparejo. Cuando las llantas se encuentran desgastadas la distancia al momento de frenar aumenta y puede poner en peligro la seguridad de los pasajeros.